En
el conocido canal en línea de videos, You Tube, ha sido colocado un video de jóvenes
realizadores cubanos, radicados en la ciudad de Holguín, donde abordan el
complejo tema de la situación del cementerio de Mayabe, en la localidad y las critica situación del mismo agravada por
el tratamiento y destino de los desechos biológicos que provienen del cercano
Hospital Clínico Quirúrgico y probablemente de otras facilidades hospitalarias
de esta ciudad.
El
documental de 18 minutos de duración fue realizado por: Nairovis Zaldívar Peña, Yainiel Diamela Pérez
Escofet y Rosaida Checa Castillo; el
documental con el título de: “Que en paz descansen” puede verse haciendo CLIC AQUÍ
El
manejo de los residuos hospitalarios, sobre todo los desechos biológicos, son
un problema de máxima prioridad de los sistemas de Salud y de los organismos e
instituciones encargados del manejo y destino final de los mismos.
Los
residuos generados por los servicios de salud se diferencian por lo menos en
cuatro categorías generales. Hay subcategorías adicionales, pero en general se
pueden clasificar de la siguiente manera:
Residuos
Sólidos Generales, residuos químicos peligrosos, residuos radioactivos y por último
los residuos infecciosos. Estos últimos son los que caen en la categoría que
toma en cuenta las indagaciones de los jóvenes que incursionaron en un trabajo
de periodismo de investigación en la ciudad de Holguín, Cuba.
Los
residuos de infecciones o digamos potencialmente infecciosos, son los generados
en los diagnósticos o tratamientos directos con pacientes que se supone
contienen patógenos (bacterias, virus, parásitos u hongos) en cantidad,
concentración o virulencia suficiente como para causar enfermedades en las
personas susceptibles. Esto incluye a los cultivos y "stocks" de
laboratorios, sangre, elementos punzantes y restos humanos o animales
("pathological waste". De manera que los restos humanos provenientes
de autopsias, accidentes, abortos, amputaciones etc. provenientes de los
hospitales locales son basura patológica que puede ser peligrosa si no se hace
los procedimientos que están establecidos para tal fin.[1]
Insisto
se trata de residuos de cirugía y autopsias realizadas a pacientes con
enfermedades infecciosas (por ej. tejidos y materiales o equipos que han estado
en contacto con sangre u otros fluidos corporales); residuos patológicos o
restos humanos o animales, tales como los tejidos, órganos, secciones del
cuerpo, fetos humanos o cadáveres de animales, sangre y fluidos corporales. Dentro
de esta categoría, las secciones de cuerpo humano o animal que son reconocibles
son también denominados residuos anatómicos. Esta categoría debería ser
considerada como una subcategoría de los residuos infecciosos, si bien puede
incluir también secciones de cuerpo sanas. Esto no es solo los desechos biológicos
pero son los que aparecen en la indagación que muestra el material del video
publicado.
Cuando
el sistema de salud y las autoridades locales se enfrentan a un problema como
este lo que debe hacerse es lo siguiente; sobre todo en la relativo a los residuos
biológicos.
Debe
definirse el problema con claridad y clasificarlo. Debe mantenerse el acento en
reducir los desechos biológicos en lo posible
en tanto que se garantiza la seguridad de los trabajadores. Para el
manejo de los desechos debe proveerse de un sistema de recolección y trasporte
adecuado estableciéndose programas bien definidos;
aplicar la tecnología apropiada de disposición final de los residuos patológicos que sean ambientalmente seguros y económicamente
razonables. No se puede andar por ahí en los cementerios tirando los desechos biológicos,
sin apenas enterrarlos y donde al poco tiempo los perros callejeros y las aves carroñeras
dan cuenta de partes anatómicas que
vienen de un hospital. ¿Es que ya no hay incineradores en los hospitales en
Cuba?
Cuando
admitimos semejante conducta irresponsable y peligrosa, no podemos aceptar la
idea de que en nuestro país no exista conciencia y conocimientos adecuados como
para saber de este problema y conocer de
sus soluciones. Un simple vistazo demuestra que especialistas cubanos conocen
de este problema de salud y saben de su manejo.
Se
conoce del riesgo en el manejo de estos desechos para el personal de salud:
Los
desechos peligrosos de las instituciones de salud constituyen un factor
importante de riesgo para el personal que interviene en su manipulación, y al
mismo tiempo contribuyen al deterioro del medio ambiente. En este trabajo se
realizó una revisión de los riesgos ocupacionales y del personal asociado al
manejo de los desechos peligrosos. Se analizaron las prácticas adecuadas y
otras técnicas de manipulación que permiten la reducción de dichos riesgos, con
el objetivo de que el personal proteja su salud y pueda desarrollar su labor
con mayor eficiencia. Se hizo un análisis de la legislación existente en el
país para garantizar la protección y la seguridad de los trabajadores durante
el manejo de los desechos peligrosos provenientes de instituciones de salud, y
se pudo apreciar que es aún insuficiente y que expresa de forma muy general las
obligaciones para la protección y seguridad de los trabajadores.[2]
Hay
información sobre el problema y la búsqueda de soluciones. En un trabajo de la Dra.
Silvia Álvarez Rosell de la Dirección de Medio Ambiente del Ministerio de Ciencia,
Tecnología y Medio Ambiente con el título de “Manejo de desechos peligrosos en
cuba. Situación actual y perspectivas”, la autora señala lo siguiente:
El
adecuado manejo de los desechos peligrosos se ha convertido en un tema de alta prioridad
para todos los países y en especial para aquellos en vías de desarrollo que en
general, carecen de infraestructura técnica sólida, tecnologías idóneas y
recursos humanos debidamente capacitados para llevar a cabo esta labor sin
causar impactos negativos sobre el medio ambiente. Para estos países, este
asunto representa un verdadero desafío, requiriéndose disponer de recursos
financieros para crear capacidades y adquirir tecnologías, lo cual debe ser
hecho realidad con el apoyo de los países desarrollados, pero que hasta ahora no
deja de ser un compromisos sin que en la práctica se materialice de forma
efectiva. La colaboración y la cooperación entre los países en desarrollo es
también una vía útil que debe potenciarse más. Este trabajo pretende exponer
como Cuba ha enfrentado este reto, presentando las acciones realizadas, las
dificultades confrontadas y las acciones futuras que deberán acometerse para
que el manejo de desechos peligrosos no constituya un problema ambiental a
resolver. [3]
Con
fecha 15 de febrero del año 1999, aparece en la edición ordinaria de la Gaceta
Oficial de la República de Cuba correspondiente
al añ XCVII, Numero 7 en la Página 11ª el
Decreto –Ley No. 190 de la Seguridad Biológica. En el capitula VII señala lo siguiente:
DE LOS
DESECHOS BIOLOGICOS PELIGROSOS.
ARTICULO
15.- Los titulares de las entidades que tienen a su cargo instalaciones y áreas
de liberación, cuyas operaciones generen desechos biológicos peligrosos,
entendiéndose por éstos, los que contienen agentes biológicos, organismos y
fragmentos de éstos con información genética, que representen un peligro real o
potencial para la salud humana y el medio ambiente en general, serán
responsables por su uso, tratamiento, transportación y disposición en
condiciones de seguridad y en correspondencia con las disposiciones ambientales
vigentes, de forma que se garantice la protección del medio ambiente y en
particular de la población y los trabajadores.
ARTÍCULO
16.- Las autoridades referidas en el artículo anterior que están
responsabilizadas con el uso, tratamiento, transportación y disposición de
desechos, deberán planificar dentro de su presupuesto de gastos los recursos
financieros necesarios, a los efectos de garantizar la cobertura de los costos
que generen dichas operaciones.
Es
decir que existe una base legal establecida en Cuba para la seguridad biológica
y el problema de los desechos biológicos.
Los
jóvenes en Holguín que hicieron posible este trabajo de periodismo de investigación
han mostrado algo que todos conocen: el terrible
abandono de los cementerios en Cuba, la actitud indolente de tantos que han
convertido los cementerios en lugares donde se roba y se ultraja la memoria de los que allí ya hacen. Pero el
asunto que muestran en el Video va más allá del destrozo ambiental de los
cementerios cubanos; se trata de mostrar que esos lugares y en particular el Cementerio
de Mayabe en la ciudad de Holguín, es un vertedero de residuos biológicos donde
no se cumplen ni las más elementales normas establecidas para tales fines.
No culpemos ahora a los especialistas de la
salud, en este asunto está la desidia de un gobierno que no prioriza asuntos tan
relevantes como es el cuidado de estas instalaciones y el cumplimiento de políticas
establecidas para el transporte y manejo de los residuos hospitalarios. Se
trata de peguntarnos si un camposanto debe ser el vertedero de los desechos biológicos
de las facilidades hospitalarias de la localidad.
Urge
tomar las medidas adecuada para que políticas y normas conocidas y aplicadas
por muchos sean instrumentalizadas en Cuba…, también en Holguín.
Nota
del Editor: Una información inicial fue publicada con un enlace al video en la página
web de temas cubanos: Cuba en vivo.
[1] Manejo de los residuos
hospitalarios. Por Hollie Shaner, N.R. y Glenn McRae .Traducción
inglés-español: Daniela Montalto y Elba Stancich .2ª edición revisada, Julio
2002. En línea. Consultada 28/6/15. Disponible en: http://www.alihuen.org.ar/coalicion-ciudadana-anti-incineracion/manejo-de-los-residuos-hospital.html
[2] Dra. Raquel de los A.
Junco Díaz y col. Seguridad ocupacional en el manejo de los desechos peligrosos
en instituciones de salud. Rev Cubana Hig Epidemiol 2003; 41(2). En línea. Consultada
28/6/16. Disponible en: http://bvs.sld.cu/revistas/hie/vol41_01_03/hie07103.htm#cargo
[3] Dra. Silvia Álvarez
Rossell. Manejo de desechos peligrosos en cuba. Situación actual y perspectivas
.Cub@: Medio Ambiente y Desarrollo; Revista electrónica de la Agencia de Medio
Ambiente
Año
5, No. 9, 2005. En línea. Disponible en: http://ama.redciencia.cu/articulos/9.06.pdf