Por:José Ramón Pupo Nieves.*
Holguín, Cuba - bitacoracubana - De estado crítico es el calificativo que se le puede dar a la situación del hospital holguinero “El Lennin”.
Esta es la visión que tuvo María Antonia Hidalgo Mir, periodista independiente, cuando tuvo que acudir allí para dar a luz a su pequeña hija.
Desde que llegó al hospital empezaron los problemas. Sólo había una camilla en el cuerpo de guardia de esta instalación provincial, y así por el estilo el salón de partos, sin ninguna condición, unas pocas sillas sin fondo ni espaldar, donde te mandan a no quitarte las chancletas de baño para que no te cortes con los vidrios esparcidos en el piso.
El médico que la atendió más bien parecía sacado de un establo de caballos, con poca profesionalidad y una conducta deplorable.
En el salón de recuperación sólo tienen cuatro camas, por lo que cuando se llenan las que restan tienen que esperar en el pasillo como ganado. La limpieza es deficiente.
Por otra parte, en la sala de paridas las sabanas están en condiciones horrendas, sólo hay una cuña sanitaria para todas las mujeres que están allí y la alimentación es deficiente y de mala calidad
*Periodista independiente, Agencia Holguin Press.
Holguín, Cuba - bitacoracubana - De estado crítico es el calificativo que se le puede dar a la situación del hospital holguinero “El Lennin”.
Esta es la visión que tuvo María Antonia Hidalgo Mir, periodista independiente, cuando tuvo que acudir allí para dar a luz a su pequeña hija.
Desde que llegó al hospital empezaron los problemas. Sólo había una camilla en el cuerpo de guardia de esta instalación provincial, y así por el estilo el salón de partos, sin ninguna condición, unas pocas sillas sin fondo ni espaldar, donde te mandan a no quitarte las chancletas de baño para que no te cortes con los vidrios esparcidos en el piso.
El médico que la atendió más bien parecía sacado de un establo de caballos, con poca profesionalidad y una conducta deplorable.
En el salón de recuperación sólo tienen cuatro camas, por lo que cuando se llenan las que restan tienen que esperar en el pasillo como ganado. La limpieza es deficiente.
Por otra parte, en la sala de paridas las sabanas están en condiciones horrendas, sólo hay una cuña sanitaria para todas las mujeres que están allí y la alimentación es deficiente y de mala calidad
*Periodista independiente, Agencia Holguin Press.
No hay comentarios:
Publicar un comentario