Miles de médicos cubanos a Brasil: ¿y nosotros qué?

Por Yaremis Flores.*

LA HABANA, Cuba, septiembre, 2013 - Desde que Cuba anunció el pasado 24 de agosto el acuerdo de cooperación médica con Brasil, Granma, diario del Partido Comunista, ha reportado en primera plana la llegada de grupos de galenos a ese país.

En todas las publicaciones omite que el ofrecimiento de “solidaridad y amor”, tendrá como pago unos 4 mil 200 dólares mensuales por médico, según revelaciones de autoridades brasileñas.

La Federación Nacional de los Médicos del país sudamericano, aseguró que los profesionales cubanos “recibirán una ínfima parte de eso”. Algunas organizaciones cariocas han calificado la colaboración cubana como trabajo esclavo.

“Por lo general el pago mensual que reciben los facultativos cubanos es inferior a 100 dólares”, precisó Yaser Rojas, médico cubano que colabora con organizaciones de la sociedad civil.

No obstante, los facultativos compiten por ser seleccionados entre sí para cumplir misión internacionalista. Cada año miles de ellos parten fuera de Cuba a prestar sus servicios, con el fin de brindar a su familia una vida un poco más próspera.

La fuente aseguró que un médico general integral en la isla gana un salario mensual de 480 a 535 pesos moneda nacional (aproximadamente 20 dólares).

“El pensamiento del médico es: voy a sacrificarme por un tiempo, me van a dar mi salario habitual, ahorro el pago por la colaboración y la suma por dieta alimenticia, unido a los regalos que hacen los pacientes, ya sea un teléfono hasta un televisor plasma”, dijo.

Analistas consideran que la exportación de profesionales, fundamentalmente médicos, es el principal ingreso del país, con unos 6.000 millones de dólares anuales. Mientras la Vice ministra del Ministerio de Salud Pública afirmó “Cuba no exporta médicos, Cuba exporta servicios de salud”.

Brasil es uno de las casi 30 naciones que reciben los servicios médicos cubanos de forma no gratuita, de un total de 58.

Más médicos en Brasil, menos médicos en Cuba

“Un contingente de 4 mil profesionales arribarán a Brasil hasta el final del 2013″, según nota informativa del Ministerio de Salud Pública de la isla. Mientras tanto la calidad de los servicios de salud en la isla continúa deteriorándose, aunque según la Organización Mundial de la Salud, Cuba tiene el mayor número de médicos por habitantes en el mundo: uno por 148 habitantes.

Autoridades del gobierno informaron recientemente a Naciones Unidas “El Sistema Nacional de Salud en Cuba, por el carácter estatal y social de la medicina, accesibilidad, cobertura universal y gratuidad de los servicios de salud, ha contribuido decisivamente a elevar los indicadores de salud de toda la población, y en particular los de la mujer y los de la niñez”.

No existen sondeos de opinión ni encuestas que permitan tener una idea del descontento de la población con la atención médica. Las quejas se escuchan a diario, en cualquier sala de espera de centros hospitalarios del país.

Regla Ríos sufrió la negligencia del personal médico del Hospital Pediátrico de La Habana.  Su nieto menor de edad está ingresado por una picada de insecto infectada, en un pie. “Le indicaron un medicamento que es para la vista, empeoró y estamos esperando su evolución, de lo contrario hay que operarlo”, lamentó.

Otra anciana, que no quiso ser identificada refirió que fue al Policlínico Docente Mario Escalona en Alamar para sacar un turno para un especialista y se lo dieron para casi dentro de dos meses. La señora de unos setenta años exclamó: ¡De aquí a esa fecha me muero!

El Dr. Rojas asevera que “Cada día es más difícil para el ciudadano de a pie encontrar un buen especialista, pues  tienen exceso de consultas diarias, o han emigrado o están en el extranjero por programas de colaboración.

“Al final la población es la que sufre la peor parte”, comentó Regla con pesimismo. “Con las misiones los médicos al menos se superan profesionalmente y fortalecen su economía. Por su parte, el Gobierno recibe beneficios económicos y respaldo internacional” ¿Y nosotros, qué?

*Yaremis Flores. La Habana, 1983. Abogada independiente. Ejerció como jueza y fue Presidenta de Sección Penal de delitos del Proceso Sumario, y Presidenta de Sección Territorial de Delitos Económicos en el Tribunal Municipal de San Miguel del Padrón. Es miembro de la ONG Asociación Jurídica Cubana (AJC)

Fuente: Cubanet