The Cuban dictator is receiving excellent care at ultra-modern medical facilities. He has the best medical equipment, medicines and doctors at his disposal. When he used to travel outside of Cuba, he would bring another plane that had a completely equipped hospital.
But what would happen if Castro was a regular Cuban citizen and he would be forced to go to one of those filthy hospitals where Cubans living under his oppressive regime have to go? The following pictures would give you an idea of what kind of medical care would the Cuban dictator be receiving if he was a regular Cuban, instead of the billionaire owner of the entire island of Cuba.
Photo: He would get an IV sitting down because there are no beds available.
The Real Cuba.
Medicina Cubana /Cuban Medicine. Salud, Medicina y Educación Médica en Cuba/Health, Medicine and Medical Education in Cuba.
jueves, noviembre 30, 2006
miércoles, noviembre 29, 2006
Cuba: El manicomio perfecto.
Seré el único loco
Por: Guillermo Fariñas*
La Habana, Cuba, noviembre 2006 - Lo anunciaban los carteles en las terminales aéreas, en las marítimas, en las carreteras: "Usted acaba de arribar al gran complejo demencial Isla Caimán Verde, establecido por la fuerza en el año 1959". Otro tipo de valla laudatoria también se leía por doquier: "La salud de nuestro adorado director es muy buena, sólo debe recuperarse para vivir 80 años más", o "La salud del director no puede ser comentada, ya que es secreto de Estado".
El otrora bello lugar de libre veraneo, era ahora un manicomio rodeado de agua, donde la presión social dentro del mismo se hacía cada vez menos soportable. Por eso, el director del supuesto centro de salud mental, históricamente, dejaba que escapasen a su conveniencia los locos más conflictivos y decididos, así evitaba la rebelión.
Como las desgracias siempre vienen juntas, el "loquero en jefe", como se hacía nombrar el director, cayó enfermo repentinamente, lo que creó incertidumbre y mucho miedo entre los pacientes, pues se podría desencadenar una "guerra de locos", la que haría desaparecer a la psiquiátrica población del sui géneris Archipiélago.
Y para rematar, la solicitada inspección de la desconocida Organización Internacional para la Salud del Trabajo, estaba encabezada por un grupo de psiquiatras y psicólogos extranjeros no chantajeables, los cuales sustentaban la hipótesis de que los administradores y jefes de psiquiatría en la Isla eran enfermos sicóticos. La prensa extranjera comenzó a llamar al sitio "El manicomio perfecto", ya que unos dementes en el ejercicio del poder pretendían a como diera lugar curar a los subordinados locos.
La situación económica, política, social, ideológica, y sobre todo alimenticia en aquel campo de concentración, propició que la mayoría de los colaboradores más cercanos a la dirección (los que viajaban al exterior) desertaran de aquella locura. Los menos favorecidos, no allegados al director, renunciaron ante la opinión pública, y no se dejaron convencer por los larguísimos discursos del director.
Una pareja de famosos psicoterapeutas fueron resucitados de sus tumbas con la mayor urgencia: Freud y Jung. Su misión consistía en diagnosticar la enfermedad del director. Tras una ardua investigación fueron plasmadas las conclusiones: "El director del Gran Complejo Demencial Isla Caimán Verde padece de egolatría".
A partir de ese momento la sola pronunciación en público del diagnóstico se consideró un delito, e incluso se realizó un referendo entre locos para que todo fuese legal. Las penas carcelarias por explicar qué era un ególatra podían oscilar entre la inmediata aplicación de electro-shocks, hasta el fusilamiento.
El alcalde del municipio colindante a la isla donde se ubicaba el manicomio, se quejaba a diario de los métodos anti-humanos que aplicaba el director a sus locos y de la excesiva cantidad de dementes que arribaban en creciente número a las costas de su cuerda municipalidad. Los locos jóvenes no querían ni trabajar, ni siquiera como "represivos loqueros privilegiados" por el director, y tampoco aspiraban a morir allí, cual eternos pacientes psiquiátricos. Su único ideal se centraba en sortear unas cuantas millas náuticas para caminar por el territorio de hombres y mujeres cuerdos.
Un día, un tal Calderín Tamayo, uno de los más eficientes "loqueros represivos", desde su puesto de gerente general de la Empresa de Seguridad Caimán Verde S.A., se entrevistó con el director para informarle de una próxima huida del reclusorio psiquiátrico, que tendría carácter masivo, según sus locos agentes. La respuesta del director ante la noticia fue una frase en tono de orden irrevocable, a viva voz, y tocándose la barba: -Tú tienes la lista de los más locos entre los locos. Ata a todos a sus camas, porque si llegan a la libertad, ¡yo seré el único loco de la Isla!.
* Psicólogo y Periodista independiente. Director de la Agencia independiente de Prensa Cubanacan Press.
Por: Guillermo Fariñas*
La Habana, Cuba, noviembre 2006 - Lo anunciaban los carteles en las terminales aéreas, en las marítimas, en las carreteras: "Usted acaba de arribar al gran complejo demencial Isla Caimán Verde, establecido por la fuerza en el año 1959". Otro tipo de valla laudatoria también se leía por doquier: "La salud de nuestro adorado director es muy buena, sólo debe recuperarse para vivir 80 años más", o "La salud del director no puede ser comentada, ya que es secreto de Estado".
El otrora bello lugar de libre veraneo, era ahora un manicomio rodeado de agua, donde la presión social dentro del mismo se hacía cada vez menos soportable. Por eso, el director del supuesto centro de salud mental, históricamente, dejaba que escapasen a su conveniencia los locos más conflictivos y decididos, así evitaba la rebelión.
Como las desgracias siempre vienen juntas, el "loquero en jefe", como se hacía nombrar el director, cayó enfermo repentinamente, lo que creó incertidumbre y mucho miedo entre los pacientes, pues se podría desencadenar una "guerra de locos", la que haría desaparecer a la psiquiátrica población del sui géneris Archipiélago.
Y para rematar, la solicitada inspección de la desconocida Organización Internacional para la Salud del Trabajo, estaba encabezada por un grupo de psiquiatras y psicólogos extranjeros no chantajeables, los cuales sustentaban la hipótesis de que los administradores y jefes de psiquiatría en la Isla eran enfermos sicóticos. La prensa extranjera comenzó a llamar al sitio "El manicomio perfecto", ya que unos dementes en el ejercicio del poder pretendían a como diera lugar curar a los subordinados locos.
La situación económica, política, social, ideológica, y sobre todo alimenticia en aquel campo de concentración, propició que la mayoría de los colaboradores más cercanos a la dirección (los que viajaban al exterior) desertaran de aquella locura. Los menos favorecidos, no allegados al director, renunciaron ante la opinión pública, y no se dejaron convencer por los larguísimos discursos del director.
Una pareja de famosos psicoterapeutas fueron resucitados de sus tumbas con la mayor urgencia: Freud y Jung. Su misión consistía en diagnosticar la enfermedad del director. Tras una ardua investigación fueron plasmadas las conclusiones: "El director del Gran Complejo Demencial Isla Caimán Verde padece de egolatría".
A partir de ese momento la sola pronunciación en público del diagnóstico se consideró un delito, e incluso se realizó un referendo entre locos para que todo fuese legal. Las penas carcelarias por explicar qué era un ególatra podían oscilar entre la inmediata aplicación de electro-shocks, hasta el fusilamiento.
El alcalde del municipio colindante a la isla donde se ubicaba el manicomio, se quejaba a diario de los métodos anti-humanos que aplicaba el director a sus locos y de la excesiva cantidad de dementes que arribaban en creciente número a las costas de su cuerda municipalidad. Los locos jóvenes no querían ni trabajar, ni siquiera como "represivos loqueros privilegiados" por el director, y tampoco aspiraban a morir allí, cual eternos pacientes psiquiátricos. Su único ideal se centraba en sortear unas cuantas millas náuticas para caminar por el territorio de hombres y mujeres cuerdos.
Un día, un tal Calderín Tamayo, uno de los más eficientes "loqueros represivos", desde su puesto de gerente general de la Empresa de Seguridad Caimán Verde S.A., se entrevistó con el director para informarle de una próxima huida del reclusorio psiquiátrico, que tendría carácter masivo, según sus locos agentes. La respuesta del director ante la noticia fue una frase en tono de orden irrevocable, a viva voz, y tocándose la barba: -Tú tienes la lista de los más locos entre los locos. Ata a todos a sus camas, porque si llegan a la libertad, ¡yo seré el único loco de la Isla!.
* Psicólogo y Periodista independiente. Director de la Agencia independiente de Prensa Cubanacan Press.
lunes, noviembre 27, 2006
New CAT scanner out of order "until further notice".
By: Guillermo Fariñas. *
Santa Clara, Cuba - November 2006 - A new Siemens CAT scanner installed scarcely six months ago in the "Arnaldo Milián Castro" Provincial Hospital here is out of order "until further notice" according to Dr. Ismelys Iglesias.
The equipment, one of only five in Cuba, is under guarantee and will be checked by the manufacturer, said sources at the Hospital.
The outage is seriously impacting patients, who must travel the 30 miles to Sagua la Grande to use much older technology.
Versión original en español
* Cuban independent journalist. Cubanacan Agency.
Santa Clara, Cuba - November 2006 - A new Siemens CAT scanner installed scarcely six months ago in the "Arnaldo Milián Castro" Provincial Hospital here is out of order "until further notice" according to Dr. Ismelys Iglesias.
The equipment, one of only five in Cuba, is under guarantee and will be checked by the manufacturer, said sources at the Hospital.
The outage is seriously impacting patients, who must travel the 30 miles to Sagua la Grande to use much older technology.
Versión original en español
* Cuban independent journalist. Cubanacan Agency.
viernes, noviembre 24, 2006
Disminución acelerada de la Natalidad en Cuba.
¿Hacia dónde van las jóvenes cubanas?
Por: Esperando un Nuevo Amanecer. *
En el día de ayer, 30 de octubre de 2006, el Periódico Granma publicaba bajo el título Reto inaplazable para los cubanos un artículo sobre la disminución acelerada de la natalidad en Cuba y el envejecimiento poblacional.
“Sin aparecer entre los problemas económicos y sociales que gravitan en la vida cotidiana de los ciudadanos, el envejecimiento poblacional constituye uno de los fenómenos más preocupantes de la sociedad cubana actual. Pero se convierte en una trama más inquietante cuando se constata la acelerada disminución de la natalidad, que es la más baja de toda América Latina.”
Luego de enumerar una serie de causas que coadyuvan a esta baja natalidad, entre las que señala "problemas materiales que el Estado tendrá que analizar cómo resolverlos para intentar detener esta negativa situación. Ellos son, por ejemplo, la insuficiencia de viviendas, el costo de la vida, la carencia de círculos infantiles y servicios de apoyo al hogar, además de las dificultades con la canastilla" en un segundo plano acota "Otro factor que repercute sobre la fecundidad es la migración hacia el exterior de mujeres en edad reproductiva.”
Y sobre este último aspecto es que me quiero referir específicamente por el indiscutible impacto que tiene sobre la sociedad misma y que es cada vez más creciente, aunque nunca se reconozca a nivel oficial; la mera e indirecta referencia que hace ese artículo a la migración juvenil es per se algo extraordinario no por ser algo nuevo sino por el hecho de que implica un reconocimiento implícito a una verdad indubitada.
Solamente de mi graduación conozco que han emigrado 32 personas hacia EUA, España, Canadá y México fundamentalmente, todas personas profesionales, invariablemente jóvenes y en edad reproductiva y sé de aproximadamente 14 de esa misma graduación que se encuentran en trámites para hacerlo, sin hablar de aquellas que nada comentan al respecto por temor a las consecuencias que ello podría acarrearles social y profesionalmente.
Puedo aseverar sin temor a equivocarme que de mi generación 7 de cada 10 personas actualmente desean, aspiran o anhelan emigrar en algún momento de Cuba; todas buscan diferentes alternativas, desde casarse con un (a) extranjero (a), participar en las loterías de diversificación de visas (popularmente conocidos por sorteo o bombo) que promueva EUA, hacer amistad con un foráneo para que éste le emita una Carta de Invitación, solicitar una reunificación familiar (si lo tuviere), realizar las aplicaciones como refugiado político, lograr por el trabajo un viaje al exterior o hasta intentar una salida ilegal por cualquier vía, pero la inmensa mayoría de una forma u otra trabaja, lucha y hace lo posible y lo aparentemente imposible para lograr su principal objetivo: salir como quiera que sea del territorio cubano y de la forma más rápida que se pueda.
Y es que se han dado cuenta, han constatado por ellos mismos que en este país sí podrán encontrar salud y educación gratuitas, pero ello nunca será suficiente para sentirse felices y realizados como seres humanos porque en este país todo se reduce a hablarte de lo mismo diariamente y jamás tendrán un futuro como el que ellos sueñan o aspiran, nunca tendrán un porvenir y no quieren una vida donde constantemente sólo te estén hablando de política, discursos, mesas redondas, marchas, movilizaciones, historia de la revolución y socialismo, mientras por otro lado cada día son menos las oportunidades reales de alcanzar tus metas y propósitos como ente social que apenas cuenta con una existencia en este planeta, por lo que deciden emigrar no sólo con el propósito de tener un futuro diferente para ellos mismos sino también para sus hijos.
Veamos algunos datos de interés que corroboran lo antes dicho:
Durante el año fiscal 2003, 2 308 mujeres nacidas en Cuba en edad reproductiva (menores de 35 años) lograron la residencia permanente en territorio estadounidense.
Esta cifra creció a 5 349 en el año fiscal 2004 y a 8 720 durante el año fiscal 2005.
Durante el año fiscal 2003 1 199 mujeres nacidas en Cuba menores de 35 años obtuvieron la ciudadanía estadounidense por naturalización. Al año siguiente la cifra alcanzó 1 676 y durante el 2005 fueron 1 680.
Es decir, solamente entre el 2003 y el 2005, las cifras de personas residentes permanentes y naturalizadas procedentes de Cuba contabilizaban a 20 932 mujeres jóvenes en edad reproductiva que optaron por abandonar su país de nacimiento en pos de un futuro diferente para ellas y sus descendientes, apenas con referencia a Estados Unidos, no incluyéndose otros países tradicionalmente receptores de cubanos como España, Canadá y México.
Todas las cifras reflejadas en este artículo son oficiales y pueden consultarse en:
http://www.uscis.gov/graphics/shared/statistics/
* Médico cubano radicado en la Isla, edita en Blog: Mi Única Verdad.
Por: Esperando un Nuevo Amanecer. *
"La juventud quiere mejor ser estimulada que instruida."
Johann Wolfgang von Goethe (1749-1832)
"He aprendido que una vida no vale nada, pero también que nada vale una vida."
André Malraux (1901-1976)
Johann Wolfgang von Goethe (1749-1832)
"He aprendido que una vida no vale nada, pero también que nada vale una vida."
André Malraux (1901-1976)
En el día de ayer, 30 de octubre de 2006, el Periódico Granma publicaba bajo el título Reto inaplazable para los cubanos un artículo sobre la disminución acelerada de la natalidad en Cuba y el envejecimiento poblacional.
“Sin aparecer entre los problemas económicos y sociales que gravitan en la vida cotidiana de los ciudadanos, el envejecimiento poblacional constituye uno de los fenómenos más preocupantes de la sociedad cubana actual. Pero se convierte en una trama más inquietante cuando se constata la acelerada disminución de la natalidad, que es la más baja de toda América Latina.”
Luego de enumerar una serie de causas que coadyuvan a esta baja natalidad, entre las que señala "problemas materiales que el Estado tendrá que analizar cómo resolverlos para intentar detener esta negativa situación. Ellos son, por ejemplo, la insuficiencia de viviendas, el costo de la vida, la carencia de círculos infantiles y servicios de apoyo al hogar, además de las dificultades con la canastilla" en un segundo plano acota "Otro factor que repercute sobre la fecundidad es la migración hacia el exterior de mujeres en edad reproductiva.”
Y sobre este último aspecto es que me quiero referir específicamente por el indiscutible impacto que tiene sobre la sociedad misma y que es cada vez más creciente, aunque nunca se reconozca a nivel oficial; la mera e indirecta referencia que hace ese artículo a la migración juvenil es per se algo extraordinario no por ser algo nuevo sino por el hecho de que implica un reconocimiento implícito a una verdad indubitada.
Solamente de mi graduación conozco que han emigrado 32 personas hacia EUA, España, Canadá y México fundamentalmente, todas personas profesionales, invariablemente jóvenes y en edad reproductiva y sé de aproximadamente 14 de esa misma graduación que se encuentran en trámites para hacerlo, sin hablar de aquellas que nada comentan al respecto por temor a las consecuencias que ello podría acarrearles social y profesionalmente.
Puedo aseverar sin temor a equivocarme que de mi generación 7 de cada 10 personas actualmente desean, aspiran o anhelan emigrar en algún momento de Cuba; todas buscan diferentes alternativas, desde casarse con un (a) extranjero (a), participar en las loterías de diversificación de visas (popularmente conocidos por sorteo o bombo) que promueva EUA, hacer amistad con un foráneo para que éste le emita una Carta de Invitación, solicitar una reunificación familiar (si lo tuviere), realizar las aplicaciones como refugiado político, lograr por el trabajo un viaje al exterior o hasta intentar una salida ilegal por cualquier vía, pero la inmensa mayoría de una forma u otra trabaja, lucha y hace lo posible y lo aparentemente imposible para lograr su principal objetivo: salir como quiera que sea del territorio cubano y de la forma más rápida que se pueda.
Y es que se han dado cuenta, han constatado por ellos mismos que en este país sí podrán encontrar salud y educación gratuitas, pero ello nunca será suficiente para sentirse felices y realizados como seres humanos porque en este país todo se reduce a hablarte de lo mismo diariamente y jamás tendrán un futuro como el que ellos sueñan o aspiran, nunca tendrán un porvenir y no quieren una vida donde constantemente sólo te estén hablando de política, discursos, mesas redondas, marchas, movilizaciones, historia de la revolución y socialismo, mientras por otro lado cada día son menos las oportunidades reales de alcanzar tus metas y propósitos como ente social que apenas cuenta con una existencia en este planeta, por lo que deciden emigrar no sólo con el propósito de tener un futuro diferente para ellos mismos sino también para sus hijos.
Veamos algunos datos de interés que corroboran lo antes dicho:
Durante el año fiscal 2003, 2 308 mujeres nacidas en Cuba en edad reproductiva (menores de 35 años) lograron la residencia permanente en territorio estadounidense.
Esta cifra creció a 5 349 en el año fiscal 2004 y a 8 720 durante el año fiscal 2005.
Durante el año fiscal 2003 1 199 mujeres nacidas en Cuba menores de 35 años obtuvieron la ciudadanía estadounidense por naturalización. Al año siguiente la cifra alcanzó 1 676 y durante el 2005 fueron 1 680.
Es decir, solamente entre el 2003 y el 2005, las cifras de personas residentes permanentes y naturalizadas procedentes de Cuba contabilizaban a 20 932 mujeres jóvenes en edad reproductiva que optaron por abandonar su país de nacimiento en pos de un futuro diferente para ellas y sus descendientes, apenas con referencia a Estados Unidos, no incluyéndose otros países tradicionalmente receptores de cubanos como España, Canadá y México.
Todas las cifras reflejadas en este artículo son oficiales y pueden consultarse en:
http://www.uscis.gov/graphics/shared/statistics/
* Médico cubano radicado en la Isla, edita en Blog: Mi Única Verdad.
Información relacionada: Retrato colectivo.
martes, noviembre 21, 2006
Resolución No. 33/2001 del Ministerio de Salud Pública de Cuba.
lunes, noviembre 20, 2006
Congreso Nacional de los trabajadores de la Salud vinculados a la Iglesia Metodista de Cuba.
La Comisión Médica Nacional de la Iglesia Metodista en Cuba estará celebrando en el Campamento Canaán en la Provincia de Santa Clara el Congreso Nacional para Trabajadores de la Salud. El mismo se celebrará el próximo mes de noviembre entre los días 23 y 25.
Se espera una participación de unos 200 profesionales de la Salud.
Como parte del programa se impartirán los siguientes talleres:
- Eutanasia.
- Anticonceptivos.
- Medicina Tradicional.
- Cuidados Paliativos (Cuidados al paciente durante la fase Terminal de la enfermedad).
También se presentarán trabajos científicos realizados por hermanos de todos los distritos de la Isla.
La Comisión está invitando al evento a todos los pastores metodistas que sean profesionales de la Salud
viernes, noviembre 17, 2006
Denial Exit Visas a Health Care Professionals in Cuba
A large portion of the Cubans denied exit visas are doctors and other health care professionals. Of the cases reported to the U.S. Interests Section, roughly half fell into this category.
The reason so many health care professionals are denied exit visas is the Public Health Ministry’s “Resolution 54”—or at least that is what many of them are told when their petitions are rejected. However no one we interviewed had ever seen the regulation—not evens those who requested copies when it was cited to deny them exit visas. “It’s like a phantom law,” one doctor told Human Rights Watch. “No one has seen it in writing.”
By most accounts, “Resolution 54” requires health care professionals applying for exit visas to wait three to five years before their application will be considered. Some doctors report that the rule specifies they spend these waiting years working in rural communities.
If the actual text of the regulation has been kept from the public, the rationale behind it has not. The restriction is part of a broader effort to prevent a “brain drain” of skilled professionals from Cuba. President Castro has accused the United States of actively luring large numbers of skilled professionals from Cuba, “thus depriving our country of medical doctors, engineers, architects and other university graduates who have been educated here, absolutely free of charge.” And he has vowed that Cuba would not tolerate an exodus of professionals, declaring that the country would not be exploited as “an incubator of brains,” and that “those [brains] it does incubate are primarily to serve our people and our brother countries in the world that suffer from plundering and poverty, not to fatten the pockets of the plunderers of the world.”
Yet, as the case of Dr. Hilda Molina above illustrates, this restriction is applied to doctors who have already made significant contributions to Cuba’s health care system. And as Dr. Molina’s case also demonstrates, one result of the policy is the forced separation of families.
Dr. Edelma Almaguer Pomares, for example, was denied an exit visa in 2004 on professional grounds after winning a U.S. visa through the immigration lottery in June 2003. Earlier in 2004, her husband, who had a U.S. visa that was expiring, had traveled to the United States expecting that Dr. Almaguer and their daughter would soon be able to join him. Under the current regulation, Dr. Almaguer will not be allowed to leave Cuba for another three years.
Similarly, Arturo Morejón won a visa to the United States in the lottery and left Cuba in October 2002. His wife, Dr. Rita María Aguilar, has been told that because she is a doctor, she could not leave for another five years. Dr. Jorge Ramos fled a medical mission in Venezuela in 2003. His wife and son have been unable to leave Cuba because she, too, is a doctor.
Roberto Gómez felt compelled to leave Cuba in August 2001 because, he said, a relative’s activities as a political dissident had closed off professional opportunities for everyone in his family. His wife was unable to obtain an exit visa because she is a doctor, so he traveled alone. The couple had planned to have children, but chose to put it off, knowing they faced a separation of at least several years. Unwilling to wait longer, in early 2005 they paid someone to bring her out of the country illegally.
Human Rights Watch
The reason so many health care professionals are denied exit visas is the Public Health Ministry’s “Resolution 54”—or at least that is what many of them are told when their petitions are rejected. However no one we interviewed had ever seen the regulation—not evens those who requested copies when it was cited to deny them exit visas. “It’s like a phantom law,” one doctor told Human Rights Watch. “No one has seen it in writing.”
By most accounts, “Resolution 54” requires health care professionals applying for exit visas to wait three to five years before their application will be considered. Some doctors report that the rule specifies they spend these waiting years working in rural communities.
If the actual text of the regulation has been kept from the public, the rationale behind it has not. The restriction is part of a broader effort to prevent a “brain drain” of skilled professionals from Cuba. President Castro has accused the United States of actively luring large numbers of skilled professionals from Cuba, “thus depriving our country of medical doctors, engineers, architects and other university graduates who have been educated here, absolutely free of charge.” And he has vowed that Cuba would not tolerate an exodus of professionals, declaring that the country would not be exploited as “an incubator of brains,” and that “those [brains] it does incubate are primarily to serve our people and our brother countries in the world that suffer from plundering and poverty, not to fatten the pockets of the plunderers of the world.”
Yet, as the case of Dr. Hilda Molina above illustrates, this restriction is applied to doctors who have already made significant contributions to Cuba’s health care system. And as Dr. Molina’s case also demonstrates, one result of the policy is the forced separation of families.
Dr. Edelma Almaguer Pomares, for example, was denied an exit visa in 2004 on professional grounds after winning a U.S. visa through the immigration lottery in June 2003. Earlier in 2004, her husband, who had a U.S. visa that was expiring, had traveled to the United States expecting that Dr. Almaguer and their daughter would soon be able to join him. Under the current regulation, Dr. Almaguer will not be allowed to leave Cuba for another three years.
Similarly, Arturo Morejón won a visa to the United States in the lottery and left Cuba in October 2002. His wife, Dr. Rita María Aguilar, has been told that because she is a doctor, she could not leave for another five years. Dr. Jorge Ramos fled a medical mission in Venezuela in 2003. His wife and son have been unable to leave Cuba because she, too, is a doctor.
Roberto Gómez felt compelled to leave Cuba in August 2001 because, he said, a relative’s activities as a political dissident had closed off professional opportunities for everyone in his family. His wife was unable to obtain an exit visa because she is a doctor, so he traveled alone. The couple had planned to have children, but chose to put it off, knowing they faced a separation of at least several years. Unwilling to wait longer, in early 2005 they paid someone to bring her out of the country illegally.
Human Rights Watch
miércoles, noviembre 15, 2006
Negación de asistencia medica especializada a enfermos de SIDA en tanto que investigaciones de laboratorio no pueden realizarse a estos enfermos.
Niegan asistencia médica a paciente con VIH-SIDA
Por: Ignacio Estrada Cerero. *
12 de noviembre de 2006 - Villa Clara, Cuba.- El servicio de Gastroenterología, en voz del Dr. Moré, médico de consulta en el Hospital “Arnaldo Milián Castro” de la Ciudad de Santa Clara, niega la asistencia médica a Bárbara Jiménez Pérez, quien sufre la pandemia de VIH-SIDA, además de ser víctima de una Hepatitis tipo C, la cual es crónica y puede ocasionarle Cirrosis Hepática.
El Dr. Moré alega no atender a personas portadoras del VIH-SIDA.
La fuente, quien es vecina de Nazareno 320 e/ San Pedro y Toscano, en el Reparto Raúl Sánchez de la ciudad de Santa Clara, es portadora del VIH-SIDA desde el año 1997.
Jiménez Pérez denuncia al Servicio de Gastroenterología del Hospital “Arnaldo Milián Castro” de la ciudad de Santa Clara por violar la declaración de los derechos fundamentales de las personas con VIH-SIDA y culpa a las instancias provinciales de salud lo que a ella le pueda suceder.
Preocupación por aumento de casos de hepatitis
El doctor Tomás Canel, médico en Medicina Interna en el sanatorio de enfermos del SIDA, sito en carretera Maleza Km. 1 ½ en la ciudad de Santa Clara, se preocupa por el constante ascenso conformidad de las hepatitis tipo B y C en pacientes con VIH-SIDA.
Las autoridades de salud en Santa Clara no dan respuesta pertinente por no contar con equipo médico para realizar las pruebas a personas afectadas por ambas hepatitis.
En la ciudad de Santa Clara se cuenta con un solo equipo de los que se usan para estos exámenes, el cual no debe ser utilizado en personas con VIH-SIDA, por lo cual estos tienen que viajar a ciudad de La Habana para tramitar dicha prueba.
El doctor Tomás Canel aclara no tener respuesta; la respuesta la tendrían las autoridades sanitarias.
* Periodista Independiente .Agencia de Prensa Jóvenes sin censura.
Fuente: Payo Libre.
Por: Ignacio Estrada Cerero. *
12 de noviembre de 2006 - Villa Clara, Cuba.- El servicio de Gastroenterología, en voz del Dr. Moré, médico de consulta en el Hospital “Arnaldo Milián Castro” de la Ciudad de Santa Clara, niega la asistencia médica a Bárbara Jiménez Pérez, quien sufre la pandemia de VIH-SIDA, además de ser víctima de una Hepatitis tipo C, la cual es crónica y puede ocasionarle Cirrosis Hepática.
El Dr. Moré alega no atender a personas portadoras del VIH-SIDA.
La fuente, quien es vecina de Nazareno 320 e/ San Pedro y Toscano, en el Reparto Raúl Sánchez de la ciudad de Santa Clara, es portadora del VIH-SIDA desde el año 1997.
Jiménez Pérez denuncia al Servicio de Gastroenterología del Hospital “Arnaldo Milián Castro” de la ciudad de Santa Clara por violar la declaración de los derechos fundamentales de las personas con VIH-SIDA y culpa a las instancias provinciales de salud lo que a ella le pueda suceder.
Preocupación por aumento de casos de hepatitis
El doctor Tomás Canel, médico en Medicina Interna en el sanatorio de enfermos del SIDA, sito en carretera Maleza Km. 1 ½ en la ciudad de Santa Clara, se preocupa por el constante ascenso conformidad de las hepatitis tipo B y C en pacientes con VIH-SIDA.
Las autoridades de salud en Santa Clara no dan respuesta pertinente por no contar con equipo médico para realizar las pruebas a personas afectadas por ambas hepatitis.
En la ciudad de Santa Clara se cuenta con un solo equipo de los que se usan para estos exámenes, el cual no debe ser utilizado en personas con VIH-SIDA, por lo cual estos tienen que viajar a ciudad de La Habana para tramitar dicha prueba.
El doctor Tomás Canel aclara no tener respuesta; la respuesta la tendrían las autoridades sanitarias.
* Periodista Independiente .Agencia de Prensa Jóvenes sin censura.
Fuente: Payo Libre.
lunes, noviembre 13, 2006
Impacto del Embargo en la Salud del pueblo en Cuba. Parcialidad aberrante.
Dr. Eloy A González.
Un extenso estudio de la Asociación Americana para la Salud Mundial ha llegado a mis manos, tal vez a destiempo. Esta organización (AASM) emprendió este estudio acerca del impacto de la política de los Estados Unidos en la población cubana a mediados de la década del 90’s.1
Entre 1995-1996 un equipo de investigadores de esta organización 2, llegó a conclusiones sobre las repercusiones del Embargo de los EEUU a Cuba, al poner ésta política: “restricciones en la entrega de material sanitario y en asegurar la alimentación”. No hay palabras mal dichas, sino mal interpretadas. ¿Como corresponde interpretar esto?
Después de vivir 40 años en una Dictadura que todo lo controla, me resulta difícil entender quién debe suplir mis necesidades sanitarias y quién debe asegurar la alimentación de la población cubana bajo el actual gobierno. Es decir quién debe cuidar, curar y alimentar a los esclavos.
Pero retomemos el estudio. Lo que hicieron los investigadores de la AASM fue,- según ellos-, analizar las repercusiones del Embargo en Cuba y estudiar los documentos sobre las experiencias del Embargo con que contaban las empresas cubanas de Importación, dudosa fuente esta última. Dicen haber visitado 46 centros de tratamiento, -médicos, debemos de suponer -, y haber realizado 160 entrevistas a profesionales médicos y otros especialistas, etc., etc.…,. “A fin de determinar el impacto de las sanciones de los Estados Unidos en la Salud Pública de Cuba”.
No dudamos de la veracidad de muchos datos aportados en este informe, pero el informe en si es parcial, y no analiza el contexto político y económico en su totalidad. Se inserta en una realidad de mediados de la década de los 90’s, donde la manipulación política del régimen cambio el discurso y la información a emplear a su entera conveniencia para tratar de explicar el drama social en que estaba sumergida la Nación después de la debacle del Campo Socialista.
La realidad y posible impacto del Embargo en la Salud y la Alimentación del pueblo cubano, debe someterse a un examen que no excluya los datos de referencia del Sistema de Salud cubano antes del 1959, para después, individualizar la década de los 60’s teniendo en cuenta los cambios y sobresaltos que se produjeron en este período de tiempo; propios de un régimen que se imponía por la fuerza y se consolidaba en el Poder.
Después aparece un período entre 1971-1991 de sovietización, economía subsidiada, aventuras internacionalistas y un discurso triunfalista en todos los órdenes, sobre todo, en materia de Salud, Educación, Cultura Física y Deportes. De tal suerte que nos convertimos en el pueblo más saludable, mejor educado, más fuerte y con más medallas olímpicas; y todo esto a pesar del Bloqueo Imperialista.
Nos enteramos de la noche a la mañana que ya éramos una Potencia Médica Mundial. Hasta el propio Dictador; de forma algo tardía y por el mismo tiempo en que la Asociación Americana para la Salud Mundial (AASM) rendía su informe, afirmaba: “Nuestro País ha pasado de la Medicina Preventiva…, a una medicina sofisticada, y hoy tenemos cosas que no las tiene nadie” .3
Con la desintegración del Campo Socialista y con ello el colapso de la economía cubana parasitaria como consecuencia del cese de los subsidios que provenían de la Ex-Unión Soviética y otros países de la Europa del Este fue que se retomó el olvidado discurso del criminal Bloqueo Imperialista, a fin de re-definir y explicar todos nuestros males.
Recordemos que antes del 1991 hablar del Bloqueo era hablar de una política Imperialista que había sido vencida, destruida y lanzada al olvido. La Revolución se había encargado de luchar y vencer al Bloqueo. Por aquellos tiempos como que vivíamos seguros, felices, bien alimentados y saludables.
Si se retomó el tema del Bloqueo en el 1991 fue para explicar la política y las medidas que se emplearon cuando se inicio el llamado Período Especial en tiempo de paz, y de paso, sensibilizar a aquellos en el extranjero,- siempre “solidarios” con la Revolución Cubana-, para que se aprestaran a enviar donaciones tras donaciones. Ni en aquel momento se minimizó ni ahora debe de minimizarse, el volumen y el alcance de solución que tuvieron,- y aún tienen-, estas donaciones de medicamentos y suministros médicos.
Tal vez, “los distinguidos expertos médicos”, como se auto titulan en el informe estos investigadores, no contaron con el tiempo suficiente en el año que duró el estudio para entrevistar a los médicos y a otros profesionales que forman parte de la variada sociedad civil cubana. Bien pudieron estos distinguidos investigadores entrevistar a los miembros de Instituto de Economistas Independientes de Cuba e incluir en sus documentos de referencias, los múltiples estudios que sobre la realidad cubana estos economistas habían elaborado por aquel tiempo. Muchos de estos profesionales cuentan con una vasta experiencia por haber trabajado por largos años en dependencias centrales del Estado cubano.
¿Por qué no consultaron a los profesionales del Colegio Médico Independiente de Cuba ó extendieron sus indagaciones a los miembros de otras organizaciones profesionales y sindicales independientes?
Es por eso que a los investigadores de la Asociación Americana para la Salud Mundial nos les resulta difícil afirmar, en virtud de las fuentes de información que tuvieron en Cuba, los siguiente: “el embargo de los EEUU contra Cuba ha perjudicado dramáticamente la Salud y la nutrición de extensos grupos de la población cubana……., gracias a la capacidad del gobierno cubano se ha impedido una catástrofe humana”.
Muchos aspectos de este u otros informes quedan por analizar; sobre todo a la luz de los argumentos que sostiene el Departamento de Estado de los EEUU al respecto 4; y de la realidad actual en el intercambio comercial,- cada vez mas creciente-, entre los EEUU y Cuba, entre otros aspectos a considerar.
Existe en todo esto muchos malentendidos, alguna desinformación y mucha pero mucha manipulación por parte de la Dictadura castro-comunista, y este tema como otros relativos a la salud de los cubanos, debe ser objeto de un exacto escrutinio que supere la parcialidad aberrante de investigadores foráneos y de los “comisarios de bata blanca” que mandan en Cuba.
Parcialidad aberrante y muestra de incontinencia en los argumentos es el que demostró el autor: A. Kirkpatrick, después de analizar el papel de los EEUU en la escasez de alimentos y medicamentos en Cuba; cuando afirma:”el gobierno de los Estados Unidos habla mucho de las violaciones de los Derechos Humanos en Cuba…., cuando se descubren violaciones de los DDHH en los Estados Unidos. Además, hay que considerar que Washington ha exagerado sus alegaciones de abuso de los Derechos Humanos en Cuba, hasta el extremo de codificarlos en una Ley” .5
Muchos de los analistas extranjeros hablan del costo social y económico del embargo, sin detenerse por un instante a considerar el costo que representa para una Nación el vivir durante 45 años bajo una férrea Dictadura, que produce, entre otras cosas una economía disfuncional y un espejismo de bienestar social colectivo.
Un día, el cual alcanzáremos a ver, será posible el análisis de todo y cada uno de las factores que intervinieron en los procesos de bienestar social que se hayan producido en nuestro país, - si es que se produjeron-, así como del impacto de políticas erradas. Todo lo cual será objeto de estudios de los investigadores cubanos cuando puedan trabajar libres de trabas y manipulaciones.
Para ese tiempo,- tal vez-, no necesitemos de distinguidos expertos médicos de otras latitudes.
Un extenso estudio de la Asociación Americana para la Salud Mundial ha llegado a mis manos, tal vez a destiempo. Esta organización (AASM) emprendió este estudio acerca del impacto de la política de los Estados Unidos en la población cubana a mediados de la década del 90’s.1
Entre 1995-1996 un equipo de investigadores de esta organización 2, llegó a conclusiones sobre las repercusiones del Embargo de los EEUU a Cuba, al poner ésta política: “restricciones en la entrega de material sanitario y en asegurar la alimentación”. No hay palabras mal dichas, sino mal interpretadas. ¿Como corresponde interpretar esto?
Después de vivir 40 años en una Dictadura que todo lo controla, me resulta difícil entender quién debe suplir mis necesidades sanitarias y quién debe asegurar la alimentación de la población cubana bajo el actual gobierno. Es decir quién debe cuidar, curar y alimentar a los esclavos.
Pero retomemos el estudio. Lo que hicieron los investigadores de la AASM fue,- según ellos-, analizar las repercusiones del Embargo en Cuba y estudiar los documentos sobre las experiencias del Embargo con que contaban las empresas cubanas de Importación, dudosa fuente esta última. Dicen haber visitado 46 centros de tratamiento, -médicos, debemos de suponer -, y haber realizado 160 entrevistas a profesionales médicos y otros especialistas, etc., etc.…,. “A fin de determinar el impacto de las sanciones de los Estados Unidos en la Salud Pública de Cuba”.
No dudamos de la veracidad de muchos datos aportados en este informe, pero el informe en si es parcial, y no analiza el contexto político y económico en su totalidad. Se inserta en una realidad de mediados de la década de los 90’s, donde la manipulación política del régimen cambio el discurso y la información a emplear a su entera conveniencia para tratar de explicar el drama social en que estaba sumergida la Nación después de la debacle del Campo Socialista.
La realidad y posible impacto del Embargo en la Salud y la Alimentación del pueblo cubano, debe someterse a un examen que no excluya los datos de referencia del Sistema de Salud cubano antes del 1959, para después, individualizar la década de los 60’s teniendo en cuenta los cambios y sobresaltos que se produjeron en este período de tiempo; propios de un régimen que se imponía por la fuerza y se consolidaba en el Poder.
Después aparece un período entre 1971-1991 de sovietización, economía subsidiada, aventuras internacionalistas y un discurso triunfalista en todos los órdenes, sobre todo, en materia de Salud, Educación, Cultura Física y Deportes. De tal suerte que nos convertimos en el pueblo más saludable, mejor educado, más fuerte y con más medallas olímpicas; y todo esto a pesar del Bloqueo Imperialista.
Nos enteramos de la noche a la mañana que ya éramos una Potencia Médica Mundial. Hasta el propio Dictador; de forma algo tardía y por el mismo tiempo en que la Asociación Americana para la Salud Mundial (AASM) rendía su informe, afirmaba: “Nuestro País ha pasado de la Medicina Preventiva…, a una medicina sofisticada, y hoy tenemos cosas que no las tiene nadie” .3
Con la desintegración del Campo Socialista y con ello el colapso de la economía cubana parasitaria como consecuencia del cese de los subsidios que provenían de la Ex-Unión Soviética y otros países de la Europa del Este fue que se retomó el olvidado discurso del criminal Bloqueo Imperialista, a fin de re-definir y explicar todos nuestros males.
Recordemos que antes del 1991 hablar del Bloqueo era hablar de una política Imperialista que había sido vencida, destruida y lanzada al olvido. La Revolución se había encargado de luchar y vencer al Bloqueo. Por aquellos tiempos como que vivíamos seguros, felices, bien alimentados y saludables.
Si se retomó el tema del Bloqueo en el 1991 fue para explicar la política y las medidas que se emplearon cuando se inicio el llamado Período Especial en tiempo de paz, y de paso, sensibilizar a aquellos en el extranjero,- siempre “solidarios” con la Revolución Cubana-, para que se aprestaran a enviar donaciones tras donaciones. Ni en aquel momento se minimizó ni ahora debe de minimizarse, el volumen y el alcance de solución que tuvieron,- y aún tienen-, estas donaciones de medicamentos y suministros médicos.
Tal vez, “los distinguidos expertos médicos”, como se auto titulan en el informe estos investigadores, no contaron con el tiempo suficiente en el año que duró el estudio para entrevistar a los médicos y a otros profesionales que forman parte de la variada sociedad civil cubana. Bien pudieron estos distinguidos investigadores entrevistar a los miembros de Instituto de Economistas Independientes de Cuba e incluir en sus documentos de referencias, los múltiples estudios que sobre la realidad cubana estos economistas habían elaborado por aquel tiempo. Muchos de estos profesionales cuentan con una vasta experiencia por haber trabajado por largos años en dependencias centrales del Estado cubano.
¿Por qué no consultaron a los profesionales del Colegio Médico Independiente de Cuba ó extendieron sus indagaciones a los miembros de otras organizaciones profesionales y sindicales independientes?
Es por eso que a los investigadores de la Asociación Americana para la Salud Mundial nos les resulta difícil afirmar, en virtud de las fuentes de información que tuvieron en Cuba, los siguiente: “el embargo de los EEUU contra Cuba ha perjudicado dramáticamente la Salud y la nutrición de extensos grupos de la población cubana……., gracias a la capacidad del gobierno cubano se ha impedido una catástrofe humana”.
Muchos aspectos de este u otros informes quedan por analizar; sobre todo a la luz de los argumentos que sostiene el Departamento de Estado de los EEUU al respecto 4; y de la realidad actual en el intercambio comercial,- cada vez mas creciente-, entre los EEUU y Cuba, entre otros aspectos a considerar.
Existe en todo esto muchos malentendidos, alguna desinformación y mucha pero mucha manipulación por parte de la Dictadura castro-comunista, y este tema como otros relativos a la salud de los cubanos, debe ser objeto de un exacto escrutinio que supere la parcialidad aberrante de investigadores foráneos y de los “comisarios de bata blanca” que mandan en Cuba.
Parcialidad aberrante y muestra de incontinencia en los argumentos es el que demostró el autor: A. Kirkpatrick, después de analizar el papel de los EEUU en la escasez de alimentos y medicamentos en Cuba; cuando afirma:”el gobierno de los Estados Unidos habla mucho de las violaciones de los Derechos Humanos en Cuba…., cuando se descubren violaciones de los DDHH en los Estados Unidos. Además, hay que considerar que Washington ha exagerado sus alegaciones de abuso de los Derechos Humanos en Cuba, hasta el extremo de codificarlos en una Ley” .5
Muchos de los analistas extranjeros hablan del costo social y económico del embargo, sin detenerse por un instante a considerar el costo que representa para una Nación el vivir durante 45 años bajo una férrea Dictadura, que produce, entre otras cosas una economía disfuncional y un espejismo de bienestar social colectivo.
Un día, el cual alcanzáremos a ver, será posible el análisis de todo y cada uno de las factores que intervinieron en los procesos de bienestar social que se hayan producido en nuestro país, - si es que se produjeron-, así como del impacto de políticas erradas. Todo lo cual será objeto de estudios de los investigadores cubanos cuando puedan trabajar libres de trabas y manipulaciones.
Para ese tiempo,- tal vez-, no necesitemos de distinguidos expertos médicos de otras latitudes.
© 2004
[1] Prohibición de alimentos y medicamentos: el impacto del embargo de los Estados Unidos en la salud y la nutrición en Cuba. Resumen Oficial. Miel Fran y Ágil Red. Para la Asociación Americana para la Salud Mundial.
[2] American Association for World Health.
[4] El embargo de los EEUU y la Salud Publica en Cuba. Mito y Realidad .Informe del Departamento de Estado de los EEUU. 5 de agosto de 1997
[5] Anthony Kirkpatrick. El papel de los Estados Unidos en la escasez de alimentos y medicamentos en Cuba.
domingo, noviembre 12, 2006
Resolución No. 54- 99 del Ministerio de Salud Pública de Cuba.
Firmada el 02 de julio de 1999 por el entonces Ministro de Salud Pública cubano, Doctor Carlos Dotres Martínez.
Publicada en la Gaceta Oficial de la República, Edición Ordinaria No. 43, del Jueves 15 de Julio de 1999, página 709. Regula el traslado definitivo o temporal de los profesionales o técnicos de la salud a otras entidades, asociaciones económicas, administrativas, de servicios u organizaciones políticas y de masas.
Disponible haciendo CLIC AQUÍ.
viernes, noviembre 10, 2006
Crimen y castigo por ser médico emigrante en Cuba.
"Emigrar es un derecho que debe ser respetado." Esto es algo reconocido y practicado por todos los países civilizados y democráticos de este planeta, pero lo curioso es que esta es la frase inicial del discurso pronunciado el 04 de noviembre de 2006 en la XVI Cumbre Iberoamericana de Montevideo por el Vicepresidente cubano Carlos Lage Dávila, representante de un gobierno que se ha caracterizado durante años por establecer y regular sistemáticamente continuas limitaciones, restricciones y atentados al derecho de emigración de sus ciudadanos.
El artículo 13.II de la Declaración Universal de los Derechos Humanos (1948) establece que "Toda persona tiene derecho a salir de cualquier país, incluso del propio, y a regresar a su país”. Toda persona tendrá derecho a salir libremente de cualquier país, incluso del propio", reza el artículo 12.2 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos (1966).La Convención Americana sobre Derechos Humanos (1969) reitera en su artículo 22.2 que "Toda persona tiene derecho a salir libremente de cualquier país, inclusive del propio."
Los anteriores preceptos son letra muerta en la República de Cuba, pues si bien en la inmensa mayoría de los Estados del mundo un ciudadano puede salir libremente del territorio de su país cuando lo desee, contando como mínimo con dos documentos esenciales: un Pasaporte y una Visa, a un cubano no le basta poseer los mismos para salir de su país, El gobierno de Cuba ha añadido un nuevo requisito, que su sola existencia ya constituye una seria conculcación al derecho de todo individuo a emigrar libremente: contar con un Permiso de Salida. Para emitir el precitado Permiso de Salida las autoridades cubanas de Inmigración exigen que el interesado cuente con la denominada “liberación” del Jefe del organismo al cual pertenece el mismo, principalmente si es un profesional. Aún cuando ha constituido una práctica recurrente limitar el derecho a emigrar libremente de cualquier cubano, indiscutiblemente que las personas que más han sufrido sus efectos han sido los médicos y otros profesionales del sector de la Salud Pública, quienes han sufrido en carne propia los efectos de una criminal e injusta posición, que roza en la obsesión patológica.
Se obliga literalmente a permanecer en el país en contra de su voluntad a personas solicitantes de la liberación de sus funciones, a pesar de que previamente hayan realizado y cumplido todos los trámites para la obtención de pasaportes, visas y otros documentos vitales para emigrar, y esa permanencia abarca periodos excesivamente prolongados (hasta el presente nunca inferior a 5 años), lapso durante el cual no se deja al solicitante cumpliendo sus funciones normales en su labor habitual sino que de hecho se penaliza, enviándolo a localidades notoriamente alejadas, en condiciones de trabajo sumamente difíciles, trasladándolo constantemente de centros, invariablemente hacia condiciones progresivamente más penosas y gravosas, todo como castigo por el único “crimen” que han cometido: querer emigrar de Cuba.
De todo lo anterior puedo dar la más veraz fe porque conozco a decenas de personas que están viviendo estas situaciones y es verdaderamente inhumano, cruel, injusto, éticamente inaceptable y violatorio de los derechos humanos más elementales el tratamiento que hoy por hoy brindan las autoridades gubernamentales cubanas a todo potencial emigrante del sector de la Salud. El tiempo, ese juez supremo, dirá la última palabra, todos aquellos que han aprobado y practicado estas injusticias pagarán adecuadamente todo el inmenso daño físico y psicológico que han causado a cientos de miles de familias cubanas; la Verdad se sabrá algún día, dejará de ser mi Verdad para ser la Verdad de todos, estoy completamente seguro de ello, y los autores intelectuales de tamaña ignominia sufrirán en cuerpo y espíritu el mismo intenso dolor que han infligido en el alma de muchísimos cubanos.
Para que se pueda constatar hasta qué punto llega la patológica obsesión gubernamental en restringir la liberación del personal de Salud Pública de sus funciones para permitírsele emigrar les ofrezco la cronología normativa de esta aberración ignominiosa; estas disposiciones son en su inmensa mayoría desconocidas en Cuba por los implicados y en las Direcciones Municipales y Provinciales de Salud Pública, a pesar de ser normas legales públicas, se les niega el acceso a su contenido a médicos, enfermeras, técnicos y otras personas interesadas, confiriéndoles a estos documentos la categoría de Secreto, hasta esos límites se ha llegado en la monopolización y estatización de la información.
Siento una enorme satisfacción en hacer verdaderamente públicas a través de Internet estas normas porque considero en primer lugar que debo estar en paz con mi conciencia, denunciando una cruel e inhumana práctica que desde ningún punto de vista tiene el más mínimo amparo jurídico ni ético y si verdaderamente existe un ser omnipotente y omnisciente más allá del ámbito terrenal en que vivimos no debe permitir la perpetuación de aquellos que de una forma u otra fomentan, practican y apoyan algo tan injustificado moral y humanamente.
Esperando un Nuevo Amanecer
Nota del Editor:
El presente artículo fue preparado por un médico cubano radicado en la Isla y que prefiere mantener su anonimato. Usa un seudónimo: “Esperando un nuevo amanecer”. Este Médico edita un Blog que puede ser consultado haciendo CLIC en el título de este artículo.
Hay información adicional sobre las Leyes y Resoluciones que se aplican en Cuba, y que tomando como fuente este Blog, iremos incluyendo en los sucesivos post que publicaremos con toda la información.
Foto: Un Cuerpo de Guardia en Cuba.
El artículo 13.II de la Declaración Universal de los Derechos Humanos (1948) establece que "Toda persona tiene derecho a salir de cualquier país, incluso del propio, y a regresar a su país”. Toda persona tendrá derecho a salir libremente de cualquier país, incluso del propio", reza el artículo 12.2 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos (1966).La Convención Americana sobre Derechos Humanos (1969) reitera en su artículo 22.2 que "Toda persona tiene derecho a salir libremente de cualquier país, inclusive del propio."
Los anteriores preceptos son letra muerta en la República de Cuba, pues si bien en la inmensa mayoría de los Estados del mundo un ciudadano puede salir libremente del territorio de su país cuando lo desee, contando como mínimo con dos documentos esenciales: un Pasaporte y una Visa, a un cubano no le basta poseer los mismos para salir de su país, El gobierno de Cuba ha añadido un nuevo requisito, que su sola existencia ya constituye una seria conculcación al derecho de todo individuo a emigrar libremente: contar con un Permiso de Salida. Para emitir el precitado Permiso de Salida las autoridades cubanas de Inmigración exigen que el interesado cuente con la denominada “liberación” del Jefe del organismo al cual pertenece el mismo, principalmente si es un profesional. Aún cuando ha constituido una práctica recurrente limitar el derecho a emigrar libremente de cualquier cubano, indiscutiblemente que las personas que más han sufrido sus efectos han sido los médicos y otros profesionales del sector de la Salud Pública, quienes han sufrido en carne propia los efectos de una criminal e injusta posición, que roza en la obsesión patológica.
Se obliga literalmente a permanecer en el país en contra de su voluntad a personas solicitantes de la liberación de sus funciones, a pesar de que previamente hayan realizado y cumplido todos los trámites para la obtención de pasaportes, visas y otros documentos vitales para emigrar, y esa permanencia abarca periodos excesivamente prolongados (hasta el presente nunca inferior a 5 años), lapso durante el cual no se deja al solicitante cumpliendo sus funciones normales en su labor habitual sino que de hecho se penaliza, enviándolo a localidades notoriamente alejadas, en condiciones de trabajo sumamente difíciles, trasladándolo constantemente de centros, invariablemente hacia condiciones progresivamente más penosas y gravosas, todo como castigo por el único “crimen” que han cometido: querer emigrar de Cuba.
De todo lo anterior puedo dar la más veraz fe porque conozco a decenas de personas que están viviendo estas situaciones y es verdaderamente inhumano, cruel, injusto, éticamente inaceptable y violatorio de los derechos humanos más elementales el tratamiento que hoy por hoy brindan las autoridades gubernamentales cubanas a todo potencial emigrante del sector de la Salud. El tiempo, ese juez supremo, dirá la última palabra, todos aquellos que han aprobado y practicado estas injusticias pagarán adecuadamente todo el inmenso daño físico y psicológico que han causado a cientos de miles de familias cubanas; la Verdad se sabrá algún día, dejará de ser mi Verdad para ser la Verdad de todos, estoy completamente seguro de ello, y los autores intelectuales de tamaña ignominia sufrirán en cuerpo y espíritu el mismo intenso dolor que han infligido en el alma de muchísimos cubanos.
Para que se pueda constatar hasta qué punto llega la patológica obsesión gubernamental en restringir la liberación del personal de Salud Pública de sus funciones para permitírsele emigrar les ofrezco la cronología normativa de esta aberración ignominiosa; estas disposiciones son en su inmensa mayoría desconocidas en Cuba por los implicados y en las Direcciones Municipales y Provinciales de Salud Pública, a pesar de ser normas legales públicas, se les niega el acceso a su contenido a médicos, enfermeras, técnicos y otras personas interesadas, confiriéndoles a estos documentos la categoría de Secreto, hasta esos límites se ha llegado en la monopolización y estatización de la información.
Siento una enorme satisfacción en hacer verdaderamente públicas a través de Internet estas normas porque considero en primer lugar que debo estar en paz con mi conciencia, denunciando una cruel e inhumana práctica que desde ningún punto de vista tiene el más mínimo amparo jurídico ni ético y si verdaderamente existe un ser omnipotente y omnisciente más allá del ámbito terrenal en que vivimos no debe permitir la perpetuación de aquellos que de una forma u otra fomentan, practican y apoyan algo tan injustificado moral y humanamente.
Esperando un Nuevo Amanecer
Nota del Editor:
El presente artículo fue preparado por un médico cubano radicado en la Isla y que prefiere mantener su anonimato. Usa un seudónimo: “Esperando un nuevo amanecer”. Este Médico edita un Blog que puede ser consultado haciendo CLIC en el título de este artículo.
Hay información adicional sobre las Leyes y Resoluciones que se aplican en Cuba, y que tomando como fuente este Blog, iremos incluyendo en los sucesivos post que publicaremos con toda la información.
Foto: Un Cuerpo de Guardia en Cuba.
miércoles, noviembre 08, 2006
Health, Politics, and Revolution in Cuba since 1898.
A book about Cuban Health by: Katherine Hirschfeld
Challenging many of the assumptions scholars have made about the Cuban Revolution’s impact on healthcare, this volume recounts one anthropologist’s quest to discover the truth behind the complicated relationship between Cuba’s revolution, politics, and healthcare system.
Katherine Hirschfeld became interested in Cuba in the mid-1990s, after reading numerous laudatory books and articles describing the Castro regime’s achievements in health and medicine. Cuba’s population health indicators seemed to be far superior to those of neighboring countries, the national health costs low and medical care free at point-of-service to the entire people. Historical records indicated that most of these positive health trends resulted from the changes instituted by Castro in 1959. Few of these authors, however, had actually spent time on the island. Thus, Hirschfeld found that academic writing on Cuba was often long on praise, but short on empirical research about what exactly had changed in Cuban medicine since 1959.
After much bureaucratic wrangling, Hirschfeld managed to secure permission to conduct long-term ethnographic research in Cuba, where she lived with families from Havana and Santiago, conducted clinic observations, interviewed doctors and patients, and was treated in a Cuban hospital during an epidemic of dengue fever. The reality of the Cuban healthcare system turned out to be different than the scholarly ideal: it was bureaucratized, authoritarian, and repressive, and most people preferred to seek healthcare in the informal economy rather than endure the material shortages, red tape, and political surveillance of the public sector.
Written in the form of a first-person narrative, Health, Politics, and Revolution in Cuba Since 1898 not only critically reevaluates Cuban healthcare after the 1959 revolution; it includes chapters detailing Cuban health trends from the Spanish-American War (1898) through the fall of Fulgencio Batista in 1959 and into the present.
Katherine Hirschfeld is assistant professor of anthropology at the University of Oklahoma. She is the recipient of the Marjorie Shostak Award for Ethnographic Writing, and has had a photography exhibit, Havana: City on the Edge of Forever, on display at a number of universities across the United States.
Challenging many of the assumptions scholars have made about the Cuban Revolution’s impact on healthcare, this volume recounts one anthropologist’s quest to discover the truth behind the complicated relationship between Cuba’s revolution, politics, and healthcare system.
Katherine Hirschfeld became interested in Cuba in the mid-1990s, after reading numerous laudatory books and articles describing the Castro regime’s achievements in health and medicine. Cuba’s population health indicators seemed to be far superior to those of neighboring countries, the national health costs low and medical care free at point-of-service to the entire people. Historical records indicated that most of these positive health trends resulted from the changes instituted by Castro in 1959. Few of these authors, however, had actually spent time on the island. Thus, Hirschfeld found that academic writing on Cuba was often long on praise, but short on empirical research about what exactly had changed in Cuban medicine since 1959.
After much bureaucratic wrangling, Hirschfeld managed to secure permission to conduct long-term ethnographic research in Cuba, where she lived with families from Havana and Santiago, conducted clinic observations, interviewed doctors and patients, and was treated in a Cuban hospital during an epidemic of dengue fever. The reality of the Cuban healthcare system turned out to be different than the scholarly ideal: it was bureaucratized, authoritarian, and repressive, and most people preferred to seek healthcare in the informal economy rather than endure the material shortages, red tape, and political surveillance of the public sector.
Written in the form of a first-person narrative, Health, Politics, and Revolution in Cuba Since 1898 not only critically reevaluates Cuban healthcare after the 1959 revolution; it includes chapters detailing Cuban health trends from the Spanish-American War (1898) through the fall of Fulgencio Batista in 1959 and into the present.
Katherine Hirschfeld is assistant professor of anthropology at the University of Oklahoma. She is the recipient of the Marjorie Shostak Award for Ethnographic Writing, and has had a photography exhibit, Havana: City on the Edge of Forever, on display at a number of universities across the United States.
lunes, noviembre 06, 2006
El Permiso del Ministro, el Carné de Identidad y el Pasaporte.
Por: Dr. José A Valdez García.*
Existe una ley fantasma en relación a los profesionales que para salir de Cuba, necesitan del permiso del Ministro de ramo, dicha ley no existe de manera oficial, sólo en boca de los que dirigen, los del partido y todos los cómplices del martirio en que han convertido a nuestra patria, entonces quien quiere salir de visita a un Congreso ,a conocer[como han conocido Francia, Italia, Inglaterra las hijas de Raúl Castro y Vilma Espin sólo para citar un simple ejemplo] debe pasar por la odisea de esperar por la firma del Ministro, generalmente los Ministros de a turno firman los viernes ,no sé 10 ,20 a lo mucho 30 ..... y si no te toca a esperar al siguiente viernes.
Esto es para todos tanto los devotos del régimen, que dicho sea de paso tienen prioridad [si además se acompaña de un regalito, puede ser un relojito, una prendita, etc. etc.]como para los no tan devotos que sólo están esperando la dichosa firma del Ministro para poderse escapar, ya sea vía misioncita o vía casado con extranjero, o algunos menos ambiciosos o más ingenuos para conocer y regresar a la isla y empezar a afrontar la realidad cubana, a comparar y pensar y a pensar en salir otra vez para no regresar.
A partir de los 90 esta ley se hizo más cruel porque entonces empezó a disminuir el número de permisos ,de manera que sólo se autorizaban casos de la entera confianza del régimen, porque allá por el año 1998 según estadísticas aproximadas dadas a conocer por Robertico, se había escapado, a tierras de libertad alrededor de 10 000 profesionales cubanos y había que poner freno, porque sino se iba abajo lo de la Potencia Médica y todo esa fanfarria hipnotizante y nauseabunda del tirano and company, hasta en África se estaban quedando los médicos cubanos. Fue famoso lo de 22 o 23 médicos que se quedaron en Mozambique con apoyo y autorización de las autoridades mozambicanas, ni hablar se empezaron a quedar con todo el fruto de su trabajo, sin tener que dar ¿El Diezmo?[en realidad cuando uno sale de misión por el gobierno el médico es quien se queda con el diezmo y el tirano con casi la novena parte de lo pactado], pero con relación a los otros, los No confiables, personas Non gratas, o los casados con extranjeros o las salidas del país [vía bombo o reunificación familiar]. el trato se convirtió en especial [lo cual no quiere decir otra cosa que característico] característico sí, pero del más grande abuso sin castigo, ni nadie que te defienda porque son órdenes de la dirigencia máxima o sea de los abusadores máximos de esos que no tienen compasión, de los que están llenos de miseria, de envidia y de lo más bajo de la condición humana. Los más grandes violadores de los derechos humanos en esta parte del mundo desde hace cuarenta años, empiezan por mandarte lejos de tu casa, señalado como que te vas del país y luego de año y medio que se demoraba antes, ahora lo mínimo son cuatro años que a veces son cinco o más, a pesar de eso la gente lo sigue haciendo, a lo mejor después de leer esto lo suben a 10 o a 20 que importa si nadie les hace nada a esta banda de delincuentes.
Ahora va una buena dentro de lo horripilante: Los Estados Unidos de América acaban de aprobar una Ley en la que cualquier cubano que salga de misión por el desgobierno cubano y que demuestre es cubano ya sea con pasaporte oficial u ordinario así como que está en funciones de misión internacionalista ya sean médicos, profesionales de la salud, entrenadores, masajistas, psicólogos, lo que sea, etc. etc. pueden solicitar asilo político en las embajadas americanas ubicadas en esos países y rápidamente les será concedido, esto como respuesta al trato miserable y degradante a los que son sometidos nuestros compatriotas por parte del régimen, con relación a los trabajos que pasan y la miseria que les pagan, solo dos o tres meses el tirano [antes de la operación de los Mondongos o Intestinos] acaba de comprar dos aviones de dos millones de dólares cada uno para uso personal.....interesante, especial, característico ¿NO?.
El carné de identidad es un documento de identificación de las personas, como debe ser en cualquier lugar del mundo y como lo es en CUBA , lo que pasa que en Cuba tiene otro uso que la población no conoce o quizás nada más los de la policía, cada documento de esos tienen unos numeritos rojos por detrás, ese numerito insignificante para muchos, es la verdadera identificación oficial conque el sistema controla a las personas y con eso saben en sus computadoras si eres un profesional o no, solo ese es el uso mayor del numerito además de identificarte para saber si eres una persona non grata o tienes antecedentes penales, a nivel nacional, a pesar de esto mucha gente se las arregló en un tiempo para salir como otra persona o sin profesión ,incluso familiares de algunos de la dictadura.
La paranoia no acaba aquí ahora también pasó a los pasaportes ,ahora los pasaportes tienen un acápite en donde dice profesión por aquello de seguir el control absoluto sobre los profesionales, pero a pesar de todo lo que inventen los cubanos seguirán buscando la forma de ingeniárselas para escapar de la vida sin vida a la que son sometidos, por un sistema improductivo, que tiene alrededor de un millón de militares entre activos e inactivos los que no producen ni una yuca, ni una malanga , ni un tomate ni un plátano ya sea micro jet o natural y que después del 61 lo único que han hecho es servir como instrumento de represión y control sobre nuestra sufrida población, aparte de las aventuras guerreristas por varios sitios del planeta.
A pesar del control férreo a que fuimos y son sometidos todavía muchos de nuestros hermanos, siempre habrá alguna forma de escapar, a pesar de que quieran callarle la boca a los disidentes siempre habrá gente dispuesta a rebelarse contra el abuso, a pesar de que apliquen la fuerza, la tortura física como psíquica la gente luchará de una forma u otra ,porque el destino final de cualquier dictadura es desparecer y pasar al olvido , por suerte la cordura perdurará sobre la retorsión de un alma envenenada que pasará a la historia sin penas ni glorias al estilo de Hitler, Musoline o Valeriano Weyler.
* Médico cubano radicado en México.
Existe una ley fantasma en relación a los profesionales que para salir de Cuba, necesitan del permiso del Ministro de ramo, dicha ley no existe de manera oficial, sólo en boca de los que dirigen, los del partido y todos los cómplices del martirio en que han convertido a nuestra patria, entonces quien quiere salir de visita a un Congreso ,a conocer[como han conocido Francia, Italia, Inglaterra las hijas de Raúl Castro y Vilma Espin sólo para citar un simple ejemplo] debe pasar por la odisea de esperar por la firma del Ministro, generalmente los Ministros de a turno firman los viernes ,no sé 10 ,20 a lo mucho 30 ..... y si no te toca a esperar al siguiente viernes.
Esto es para todos tanto los devotos del régimen, que dicho sea de paso tienen prioridad [si además se acompaña de un regalito, puede ser un relojito, una prendita, etc. etc.]como para los no tan devotos que sólo están esperando la dichosa firma del Ministro para poderse escapar, ya sea vía misioncita o vía casado con extranjero, o algunos menos ambiciosos o más ingenuos para conocer y regresar a la isla y empezar a afrontar la realidad cubana, a comparar y pensar y a pensar en salir otra vez para no regresar.
A partir de los 90 esta ley se hizo más cruel porque entonces empezó a disminuir el número de permisos ,de manera que sólo se autorizaban casos de la entera confianza del régimen, porque allá por el año 1998 según estadísticas aproximadas dadas a conocer por Robertico, se había escapado, a tierras de libertad alrededor de 10 000 profesionales cubanos y había que poner freno, porque sino se iba abajo lo de la Potencia Médica y todo esa fanfarria hipnotizante y nauseabunda del tirano and company, hasta en África se estaban quedando los médicos cubanos. Fue famoso lo de 22 o 23 médicos que se quedaron en Mozambique con apoyo y autorización de las autoridades mozambicanas, ni hablar se empezaron a quedar con todo el fruto de su trabajo, sin tener que dar ¿El Diezmo?[en realidad cuando uno sale de misión por el gobierno el médico es quien se queda con el diezmo y el tirano con casi la novena parte de lo pactado], pero con relación a los otros, los No confiables, personas Non gratas, o los casados con extranjeros o las salidas del país [vía bombo o reunificación familiar]. el trato se convirtió en especial [lo cual no quiere decir otra cosa que característico] característico sí, pero del más grande abuso sin castigo, ni nadie que te defienda porque son órdenes de la dirigencia máxima o sea de los abusadores máximos de esos que no tienen compasión, de los que están llenos de miseria, de envidia y de lo más bajo de la condición humana. Los más grandes violadores de los derechos humanos en esta parte del mundo desde hace cuarenta años, empiezan por mandarte lejos de tu casa, señalado como que te vas del país y luego de año y medio que se demoraba antes, ahora lo mínimo son cuatro años que a veces son cinco o más, a pesar de eso la gente lo sigue haciendo, a lo mejor después de leer esto lo suben a 10 o a 20 que importa si nadie les hace nada a esta banda de delincuentes.
Ahora va una buena dentro de lo horripilante: Los Estados Unidos de América acaban de aprobar una Ley en la que cualquier cubano que salga de misión por el desgobierno cubano y que demuestre es cubano ya sea con pasaporte oficial u ordinario así como que está en funciones de misión internacionalista ya sean médicos, profesionales de la salud, entrenadores, masajistas, psicólogos, lo que sea, etc. etc. pueden solicitar asilo político en las embajadas americanas ubicadas en esos países y rápidamente les será concedido, esto como respuesta al trato miserable y degradante a los que son sometidos nuestros compatriotas por parte del régimen, con relación a los trabajos que pasan y la miseria que les pagan, solo dos o tres meses el tirano [antes de la operación de los Mondongos o Intestinos] acaba de comprar dos aviones de dos millones de dólares cada uno para uso personal.....interesante, especial, característico ¿NO?.
El carné de identidad es un documento de identificación de las personas, como debe ser en cualquier lugar del mundo y como lo es en CUBA , lo que pasa que en Cuba tiene otro uso que la población no conoce o quizás nada más los de la policía, cada documento de esos tienen unos numeritos rojos por detrás, ese numerito insignificante para muchos, es la verdadera identificación oficial conque el sistema controla a las personas y con eso saben en sus computadoras si eres un profesional o no, solo ese es el uso mayor del numerito además de identificarte para saber si eres una persona non grata o tienes antecedentes penales, a nivel nacional, a pesar de esto mucha gente se las arregló en un tiempo para salir como otra persona o sin profesión ,incluso familiares de algunos de la dictadura.
La paranoia no acaba aquí ahora también pasó a los pasaportes ,ahora los pasaportes tienen un acápite en donde dice profesión por aquello de seguir el control absoluto sobre los profesionales, pero a pesar de todo lo que inventen los cubanos seguirán buscando la forma de ingeniárselas para escapar de la vida sin vida a la que son sometidos, por un sistema improductivo, que tiene alrededor de un millón de militares entre activos e inactivos los que no producen ni una yuca, ni una malanga , ni un tomate ni un plátano ya sea micro jet o natural y que después del 61 lo único que han hecho es servir como instrumento de represión y control sobre nuestra sufrida población, aparte de las aventuras guerreristas por varios sitios del planeta.
A pesar del control férreo a que fuimos y son sometidos todavía muchos de nuestros hermanos, siempre habrá alguna forma de escapar, a pesar de que quieran callarle la boca a los disidentes siempre habrá gente dispuesta a rebelarse contra el abuso, a pesar de que apliquen la fuerza, la tortura física como psíquica la gente luchará de una forma u otra ,porque el destino final de cualquier dictadura es desparecer y pasar al olvido , por suerte la cordura perdurará sobre la retorsión de un alma envenenada que pasará a la historia sin penas ni glorias al estilo de Hitler, Musoline o Valeriano Weyler.
* Médico cubano radicado en México.
sábado, noviembre 04, 2006
Is the economic embargo responsible for the scarcity of food and medicine in Cuba?
Is the economic embargo responsible for the scarcity of food and medicine in Cuba? Absolutely not. Despite the U.S. embargo, Cuba can and does trade with the rest of the world. Any medicine or food that Cuba wishes to acquire can be obtained in Mexico, Canada or Panama, to mention only a few countries in geographic proximity with Cuba. In fact, acquiring medicines in Canada or Mexico is less expensive than buying them in the U.S. The medicines produced in the United States are on average 25% less expensive in those countries. In addition, the Cuban people lack even medicines that are produced in Cuba, such as aspirin, and antibiotics, because Castro exports them to countries like Nicaragua and Ecuador, thereby depriving the Cuban people. It is the same with food. To blame the embargo for the lack of food in Cuba is ridiculous. Food staples such as vegetables, pork, chicken and eggs that were in natural abundance in Cuba have declined markedly in Fidel Castro' centralized economy. His failed economic policies have ruined a previously prosperous nation. Farmers were stripped of land that now lies vacant and abandoned. The Minister of Agriculture himself recognized that 25% of the land is overrun with weeds. Farmers are not allowed to cultivate that land. To blame the United States and the embargo for shortages in Cuba is nothing more than a myth that has been propagated to hoodwink those who are not familiar with Cuba' reality.
Cuba's budget assigns an average of $4 million annually for importing medicines. In contrast, the European Union donates to Cuba approximately $10 million in food and medicine each year and the United States, the embargo notwithstanding, has donated nearly $472 millions in medicine to Cuba in the last ten years. With these quantities in donations, Cuban would have more than enough to satisfy internal demand. But, where are those medicines? They can be found in hospitals for the exclusive use of foreigners who pay for medical services in Cuba in dollars, and in hospitals reserved for the political elite of the country (when the average Cuban is prohibited from seeking medical care). Those exclusive hospitals and clinics do not suffer from medicine shortages. Medicines can also be found in stores that accept only dollars. The truth is that the Cuban people do not have access to that food and medicine because of Fidel Castro' discriminatory policies.
The Commercial Embargo of the United States. Foundation for Human Rights in Cuba.